sábado, 29 de noviembre de 2014

Una licenciada más

Y ya está. De un plumazo, una vida entera es distinta. Toda una personalidad en un instante, que se ve venir, acercarse despacio.

Que revoluciona toda tu existencia, que se apodera de tu mente y le da un cierto sentido a tu existencia.

Entregar todas tus esperanzas a un momento, a un papel que una ráfaga de aire se puede llevar, y que se acabará llevando cuando tú ni siquiera pertenezcas a la memoria de los pobladores del mundo.

Y cuando todo ha pasado...

andar por la calle mirando al frente, mirando y no viendo.

Dejando que tus pensamientos vuelen libres y no sentirte culpable por ello; es más, aprovechar esos momentos, observar cómo van tomando forma y revolotean a tu alrededor.